Autoclave Clase B: todo lo que necesitas saber

abr 20, 2022 | escrito por:

 La esterilización de los materiales es un tema central para cualquier consultorio odontológico. Forma parte del proceso de reacondicionamiento de los instrumentos, que incluye las siguientes fases:

    1. Recogida del material
    2. Desinfección
    3. Lavado
    4. Aclarado
    5. Secado
    6. Control y mantenimiento
    7. Envasado
    8. Esterilización
    9. Trazabilidad
    10. Almacenamiento
Es interesante subrayar que los aparatos desarrollados por Mocom, como Tethys H10, se ocupan de manera totalmente automática de las fases 2 – 3 – 4 – 5, lo que comporta un ahorro de tiempo para el auxiliar y una mayor rapidez y eficiencia de todo el proceso.

Las 3 clases de autoclaves de vapor

Las autoclaves se utilizan para esterilizar los instrumentos y los utensilios quirúrgicos. Existen tres clases: 

Autoclaves de Clase B, que ofrecen las máximas prestaciones y son capaces de esterilizar todos los instrumentos esterilizables presentes en los consultorios odontológicos. Autoclaves de Clase S (S significa «specified») y de Clase N (N significa «naked»)

Los 3 ciclos ejecutados por las autoclaves B, S y N se pueden sintetizar brevemente de este modo:

Ciclo de tipo B
Utilizado para materiales porosos e instrumentos huecos y sólidos con embalaje doble, embalaje simple o sin embalaje. Este ciclo ofrece la máxima seguridad para la esterilización de todos los tipos de instrumentos que se utilizan en la consulta odontológica.

Ciclo de tipo S
Utilizado para los tipos de materiales o instrumentos declarados por el fabricante. Este ciclo solo ofrece una seguridad aceptable para los instrumentos indicados en el manual.

Ciclo de tipo N
Utilizado solamente para instrumentos sólidos, no envasados. Este ciclo solo ofrece una garantía adecuada en caso de uso inmediato, dado que no es posible efectuar el almacenamiento estéril.

La autoclave, denominada también esterilizadora, forma parte del equipamiento esencial del consultorio. El médico odontólogo tiene la obligación de esterilizar los instrumentos, por lo que estos equipos están considerados como productos sanitarios y sus fabricantes deben proporcionar instrucciones de uso y mantenimiento que exigen un riguroso cumplimiento.

Las autoclaves de vapor saturado deben garantizar una probabilidad inferior a 1/1 000 000 de que sobreviva un microorganismo contaminante. Una vez esterilizado, el material permanece adecuadamente envasado y conservado en un estado de asepsia durante un cierto tiempo, hasta su próxima utilización.

¿Cómo funciona una autoclave de Clase B?

Además de los instrumentos, la cámara de esterilización contiene aire en su interior. El agente esterilizante, en este caso vapor a 134 °C, debe entrar directamente en contacto con las superficies de los materiales, por lo que es oportuno sustituir el aire con el vapor. Esto se lleva a cabo mediante una fase conocida con el nombre de prevacío fraccionado seguida de un fuerte incremento de presión, que se mantiene a 2,1 bar durante el tiempo necesario para la esterilización. Por último, el secado a presión negativa permite minimizar la presencia de humedad en la cámara de esterilización.

 

Mantenimiento de una autoclave de Clase B

Aunque la calidad del aparato garantiza sus prestaciones, es fundamental seguir rigurosamente las operaciones de mantenimiento. 

Es necesario limpiar las superficies externas y la puerta y su junta todos los días. Cada semana se debe desinfectar el depósito del agua y limpiar meticulosamente los filtros internos.

Nosotros aconsejamos seguir siempre atentamente las recomendaciones del fabricante del dispositivo.

Las autoclaves necesitan un mantenimiento periódico: de la simple sustitución de la junta de la puerta a una revisión técnica general.

¿Cómo elegir la autoclave más adecuada para ti?

Damos por hecho que la mejor opción es la autoclave de Clase B. Sin embargo, es necesario tener en cuenta algunos factores que pueden incidir en la elección, como:

  • el número de personas encargadas de las operaciones de reacondicionamiento del material en el consultorio
  • el volumen de instrumental utilizado en el consultorio (la cantidad de piezas de mano o de otros elementos esterilizables)
  • el número de sillones utilizados en el consultorio o en la clínica

También cabe considerar la gama de las autoclaves Mocom que, a pesar de mantener exactamente las mismas dimensiones externas —un aspecto utilísimo cuando se dispone de un espacio fijo—, tienen tres capacidades distintas: 17, 22 y 28 litros.

Copia di MOCOM  POST FB 2

 

 

A continuación se exponen algunos casos comunes a título de ejemplo:

En un consultorio con 2 sillones, un auxiliar que se ocupa de la esterilización y abundante instrumental aconsejamos una autoclave de 28 litros, utilizándola una vez después de las sesiones de la mañana y otra vez por la noche.

En un consultorio con 2 sillones, dos o tres auxiliares y una cantidad limitada de piezas de mano y material para esterilizar es más útil tener una autoclave con una capacidad de 22 litros (o incluso de 17 litros solamente), dado que permite gestionar ciclos frecuentes durante todo el día.

En una clínica con al menos 4/5 sillones, varios médicos y auxiliares y un volumen considerable de instrumentos para reacondicionar aconsejamos al menos una autoclave grande, que se utilizará de manera programada durante el día, y una autoclave pequeña de 17 litros para las emergencias.

¿Autoclave Clase B pequeña o grande?     

Para el odontólogo que debe tomar esta decisión, puede ser útil saber cómo ha evolucionado el mercado en los últimos 5 años. Se observa una tendencia a preferir las autoclaves de mayor capacidad. La tabla indica mejor cuáles son las capacidades y los volúmenes de carga.

Immagine2

El uso del modelo de 17 litros está disminuyendo por un motivo evidente: para esterilizar 18 kg de material es necesario efectuar 3 ciclos, mientras que con el modelo de 28 litros bastan 2 ciclos. Los tiempos del proceso no son muy diferentes, de manera que la rapidez y el menor consumo de la autoclave de mayor capacidad juegan a su favor. 

Además, la de 28 litros solo cuesta un 20 % más que la de 17 litros aproximadamente. Por este motivo, pocas veces encontramos un consultorio odontológico que posea únicamente el modelo más pequeño.

 

Supreme

Rediseña el mundo de la esterilización.
Su consumo mínimo y sin igual hace que Supremesea el nuevo paradigma del mercado.

Descubre màs

Volver a las entradas